Quien quiera construir un edificio alto debe asegurarse de afianzar bien los cimientos. La altura del edificio dependerá de lo afianzados y firmes que sean los cimientos. Los actos constituyen el edificio. La fe constituye los cimientos.
Cuanto más consistentes sean los cimientos, más estable y elevado será el edificio; y en caso de que se desprenda una parte, es fácil restaurarlo. Pero si los cimientos son inconsistentes, no puede levantarse el edificio y mantenerse firme; y en caso de que se desprenda parte de los cimientos, el edificio se derrumba por completo o casi.
Por esto la persona sabia se centra en corregir los cimientos y afianzarlos. El ignorante, por el contrario, se centra levantar el edificio aunque sea sin cimientos, por lo que acaba derrumbado. Dice Al-lah: ¿Acaso no es mejor quien cimienta su edificio sobre la piedad y la complacencia de Al-lah que quien ha cimentado al borde de una acantilado arenoso a punto de desplomarse y que pronto precipitará a sus promotores al Infierno? [El Corán, 9:109]. [...]
Los componentes que conforman los cimientos son dos:
Conocer correctamente a Al-lah, sus órdenes, nombres y atributos.
Someterse únicamente a Al-lah y a su Mensajero
ﷺ. Estos son los cimientos más firmes sobre los que el siervo puede elevar su edificio. Y la altura del edificio es proporcional a la firmeza de estos cimientos.
📚 Ibn al Qaim: Al fauaid (175)
✒️ Akram ibn Ahmad
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Quien quiera construir un edificio alto debe asegurarse de afianzar bien los cimientos. La altura del edificio dependerá de lo afianzados y firmes que sean los cimientos. Los actos constituyen el edificio. La fe constituye los cimientos.
Cuanto más consistentes sean los cimientos, más estable y elevado será el edificio; y en caso de que se desprenda una parte, es fácil restaurarlo. Pero si los cimientos son inconsistentes, no puede levantarse el edificio y mantenerse firme; y en caso de que se desprenda parte de los cimientos, el edificio se derrumba por completo o casi.
Por esto la persona sabia se centra en corregir los cimientos y afianzarlos. El ignorante, por el contrario, se centra levantar el edificio aunque sea sin cimientos, por lo que acaba derrumbado. Dice Al-lah: ¿Acaso no es mejor quien cimienta su edificio sobre la piedad y la complacencia de Al-lah que quien ha cimentado al borde de una acantilado arenoso a punto de desplomarse y que pronto precipitará a sus promotores al Infierno? [El Corán, 9:109]. [...]
Los componentes que conforman los cimientos son dos:
Conocer correctamente a Al-lah, sus órdenes, nombres y atributos.
Someterse únicamente a Al-lah y a su Mensajero
ﷺ. Estos son los cimientos más firmes sobre los que el siervo puede elevar su edificio. Y la altura del edificio es proporcional a la firmeza de estos cimientos.
📚 Ibn al Qaim: Al fauaid (175)
✒️ Akram ibn Ahmad